miércoles, 10 de agosto de 2011

La salud mental según la Medicina Tradicional China

Por enfermedades mentales se entienden aquellos tipos de anomalías en los que debido a diversos motivos, en particular la excesiva excitación espiritual y psíquica, las funciones de los órganos y las vísceras del cuerpo humano pierden su normalidad, se dañan y se debilitan el qi (energía), la sangre, los líquidos corporales, el jing (esencia) y la médula, o hay caos en su circulación. Todo esto causa disfunción del Corazón y el cerebro, que se manifiesta en cambios extraños en los diversos tipos de conciencia, sentimientos, ánimo, habla y conducta.
Las enfermedades mentales en la MTCh (Medicina Tradicional China) no equivalen totalmente a las de la medicina moderna. Tienen relaciones entre sí y se diferencian las unas de las otras. Las enfermedades mentales a que se refiere la MTCh abarcan casi todos los síntomas de los trastornos mentales de la medicina moderna. Sus diferencias consisten en que, primero, la clasificación es distinta, pues una psicosis puede verse expresada en varias enfermedades mentales, por ejemplo la neurosis, en medicina tradicional se hace diferenciación y tratamiento de síntomas principalmente manifestados como palpitación y taquicardia, amnesia, insomnio, depresión y sincope, etc.; segundo, el campo es diferente pues las enfermedades mentales en la MTCh incluyen casi todas las psicosis, y al mismo tiempo, otros males, por ejemplo, la arritmia causada por enfermedades cardíacas si se manifiesta con palpitación y taquicardia en la práctica clínica, como su síntoma principal, la enfermedad pertenece al campo mental. Estas diferencias nacen principalmente en la diversidad del método y ángulo de enfoque de los problemas.
El cuerpo humano es un conjunto orgánico íntegro con los órganos (zang) y las vísceras (fu) como centro. Cada víscera, órgano y tejido tienen sus respectivas funciones. Estas actividades y funciones distintas son partes integrantes de las actividades del conjunto. Se coordinan y se aprovechan, lo cual determina sus influencias recíprocas en la patología. Las actividades mentales, tal como las otras actividades vitales, son también producto de las actividades funcionales de las vísceras y los órganos.
La alegría, la ira, la ansiedad, la meditación, la tristeza, el miedo y el terror son 7 factores emocionales. Sus alteraciones son el reflejo del cuerpo humano respecto al mundo externo, es la manifestación de las actividades funcionales de los órganos y las vísceras, no originan enfermedades mentales. Pero una estimulación repentina, fuerte y permanente en lo emocional puede causar trastornos en las funciones de los órganos y vísceras y disturbios en la circulación del qi y la sangre, conduciendo a enfermedades mentales. El capítulo “Exposición de gran importancia sobre el Yin y Yang” de Suwen dice: “La ira daña el Hígado”, “la alegría perjudica el Corazón”, “la meditación perjudica el Bazo”, “La tristeza daña los Pulmones”, “el temor daña los Riñones”.
La alteración anormal de las emociones perjudica los órganos internos, haciendo que pierdan la normalidad en el ascenso y descenso y se disturbe la circulación del qi y la sangre. Sus manifestaciones son muy concretas: “La ira eleva el qi; la alegría lo lenifica, la tristeza hace desaparecer el qi y el temor lo desciende”, “el terror desordena el qi”, “la meditación contribuye a la acumulación del qi”. Esto es: una excesiva ira puede originar un ascenso vertiginoso del qi que ataca y desordena el ánimo y la lucidez produciendo extravagancias e insultos furiosos, insomnio y muchas pesadillas, deseo de pegar, de romper objetos, incluso la sangre puede acompañarlo en el ascenso ocupando el cerebro y provocar, por lo tanto, un desmayo. La excesiva alegría puede causar la dispersión y evaporación del qi del Corazón, el espíritu no se guarda en su lugar, originando la posibilidad de no encontrar la atención, e incluso se puede perder el shen y enloquecer. La excesiva tristeza daña el qi pulmonar y rebaja la voluntad. Un excesivo temor puede alterar la solidez del qi de Riñón que escapa hacia abajo, y su síntoma es la imposibilidad de control sobre la materia fecal y la orina. O el temor no se resuelve y daña la esencia, produciendo mareo y vértigo, amnesia, eyaculación seminal involuntaria; el repentino terror hace que el Corazón y el espíritu pierdan su administrador, el espíritu no tiene a qué adherirse, el pensamiento no encuentra estabilidad, y eso se manifiesta en la intranquilidad y el desconcierto. La excesiva meditación daña el shen y el Bazo; y su consecuencia es la disfunción en el transporte y transformación, el estancamiento en el mecanismo de qi causa anorexia, distensión abdominal o malgaste de la sangre Yin, y el Corazón y el espíritu pierden su apoyo por lo que se presentan palpitación, amnesia, insomnio y pesadillas. “El Corazón: si se mantiene tenso en permanente alerta, la angustia y meditación, daña el shen, con el shen dañado, se teme perder”, “el Bazo: si no se libra de la angustia, daña el pensamiento, con el pensamiento trastornado, viene el caos”, “el Hígado: la excesiva tristeza que conmueve el jiao medio daña el alma, con el alma dañada se pierde la memoria”, “los Pulmones: la alegría excesiva hiere la psique y con la psique herida viene el kuang”, “los Riñones: la cólera incesante daña la voluntad, con la voluntad dañada se olvida lo pasado”. Se puede deducir de ello que el excesivo cambio emocional puede perjudicar los 5 órganos. Con el surgimiento de las alteraciones emocionales, se pierde la normalidad de la conducta, decaen la memoria y la inteligencia y se producen otros cambios mentales negativos semejantes. Como el Corazón es el principal órgano administrador y cavidad de la mente y regula las actividades mentales del hombre, la alteración anormal emocional, necesariamente, afecta primero al Corazón, después a los otros órganos, produciendo cambios mentales anormales. A través de numerosos casos clínicos, la experiencia muestra que el daño derivado de los 7 factores emocionales son factores principales conducentes a enfermedades mentales.

Manuel Gómez Hevia

LOS CODIGOS SECRETOS DE LA CABALA

LOS CODIGOS SECRETOS DE LA CABALA

 Cada persona pertenecemos a un codigo segun nuestra fecha de nacimiento, estos codigos se vienen aplicando desde la antigüedad para saber como somos y como nos comportaremos segun estemos en exceso o en deficiencia. los doce codigos son los siguientes:

1. IGNORANCIA- SABIDURIA
2. TRISTEZA – ALEGRIA
3. INTEMPERANCIA – VIRTUD
4. CONCUPISCENCIA – SOBRIEDAD
5. LEALTAD – DESLEALTAD
6. AVARICIA – GENEROSIDAD
7. ERROR – ACIERTO
8. EMULACION – RAZON
9. ASTUCIA – INOCENCIA
10. COLERA – SOSIEGO
11. IMPRUDENCIA – PRUDENCIA
12. MALDAD- BONDAD
CODIGO 1

5/2/1924 al 24/1/1925 Madera
24/1/1936 al 10/2/1937 Fuego
10/2/1948 al 28/1/1949 Tierra
28/1/1960 al 14/2/1961 Metal
16/1/1972 al 2/2/1973 Agua
2/2/1984 al 19/2/1985 Madera
19/2/1996  al 7/2/1997 Fuego



CODIGO 2

22/1/1925 al 12/2/1926 Madera
11/2/1937 al 30/1/1938 Fuego
30/1/1949 al 16/2/1950 Tierra
15/2/1961 al 4/2/1962 Metal
3/2/1973 al 22/1/1974 Agua
20/2/1985 al 8/2/1986 Madera
7/2/1997  al 27/1/1998 Fuego



CODIGO 3

13/2/1926 al 1/2/1927 Fuego
31/1/1938 al 18/2/1939 Tierra
17/2/1950 al 5/2/1951 Metal
5/2/1962 al 24/1/1963 Agua
23/1/1974 al 10/2/1975 Madera
9/2/1986 al 28/1/1987 Fuego
28/1/1998  al 15/2/1999 Tierra


CODIGO 4

2/2/1927 al 22/1/1928 Fuego
19/2/1939 al 7/2/1940 Tierra
6/2/1951 al 26/1/1952 Metal
25/1/1963 al 12/2/1964 Agua
11/1/1975 al 30/1/1976 Madera
29/1/1987 al 16/2/1988 Fuego




CODIGO 5

23/1/1928 al 9/2/1929 Tierra
8/2/1940 al 26/1/1941 Metal
27/1/1952 al 13/2/1953 Agua
13/2/1964 al 1/2/1965 Madera
31/1/1976 al 17/2/1977 Fuego
17/2/1988  al 5/2/1989 Tierra




CODIGO 6

10/2/1929 al 29/1/1930 Tierra
27/1/1941 al 14/2/1942 Metal
14/2/1953 al 2/2/1954 Agua
2/2/1965 al 20/1/1966 Madera
18/2/1977 al 6/2/1978 Fuego
6/2/1989  al 26/1/1990 Tierra





CODIGO 7

30/1/1930 al 16/2/1931 Metal
15/2/1942 al 4/2/1943 Agua
3/2/1954 al 23/1/1955 Madera
21/1/1966 al 8/2/1967 Fuego
7/2/1978 al 27/1/1979 Tierra
27/1/1990  al 14/2/1991 Metal



CODIGO 8

17/2/1931 al 5/2/1932 Metal
5/2/1943 al 24/1/1944 Agua
24/1/1955 al 11/2/1956 Madera
9/2/1967 al 29/1/1968 Fuego
28/1/1979 al 15/2/1980 Tierra
15/2/1991  al 3/2/1992 Metal


CODIGO 9

6/2/1932 al 25/1/1933 Agua
25/1/1944 al 12/2/1945 Madera
12/2/1956 al 30/1/1957 Fuego
30/1/1968 al 16/2/1969 Tierra
16/2/1980 al 4/2/1981 Metal
4/2/1992  al 22/1/1993 Agua



CODIGO 10

26/1/1933 al 13/2/1934 Agua
13/2/1945 al 1/2/1946 Madera
31/1/1957 al 17/2/1958 Fuego
17/2/1969 al 5/2/1970 Tierra
5/2/1981 al 24/1/1982 Metal
23/1/1993  al 9/2/1994 Agua


CODIGO 11

14/2/1934 al 3/2/1935 Madera
2/2/1946 al 21/1/1947 Fuego
18/2/1958 al 7/2/1959 Tierra
6/2/1970 al 26/1/1971 Metal
25/1/1982 al 12/2/1983 Agua
10/2/1994 al 30/1/1995 Madera

CODIGO 12

4/2/1935 al 23/1/1936 Madera
22/1/1947 al 9/2/1948 Fuego
8/2/1959 al 27/1/1960 Tierra
27/1/1971 al 15/1/1972 Metal
13/2/1983 al 1/2/1984 Agua
31/1/1995 al 18/2/1996 Madera


jueves, 4 de agosto de 2011

LA GRAN PRUEBA

Li Tse-Kiang era un hombre que, entre sus muchas virtudes y sus muchos defectos, adolecía de una muy común enfermedad del espíritu: la codicia. Su ambición por conseguir más y más estaba alimentada por la vanidad, pues disfrutaba de cierta reputación en su ciudad: todo el mundo sabía como se llamaba y alguna vez había oído que su nombre estaba en las conversaciones de sus vecinos. Todo ello lo había convencido de que el suyo era un destino especial, diferente del de los demás hombre, por lo que decidió convertirse en juez de los litigios de sus conciudadanos. Muchos eran candidatos a ocupar el puesto, pero ninguno de su valía, se repetía a sí mismo.
Cuando colgaron en un poste de la plaza del pueblo los resultados de las pruebas para acceder a juez, él estaba todavía desayunando en una taberna. Al enterarse, salió corriendo con la boca llena a comprobar que su nombre estaba entre los elegidos para el puesto. Buscó entre los nombres, y tal fue su disgusto al ver que no estaba, que sintió que sus sentimientos se removían en su estómago como si hubiera un terremoto. Intentó tragar el arroz empapado de vino que aún daba vueltas en su boca, pero, testarudo, quedó prisionero en su pecho. Notaba el nudo ahí, en el corazón, como un remordimiento. Empezó a sentirse mal: el sudor empapaba su frente y su piel se tornó blanca de repente; tuvo que tenderse en el suelo para no caer víctima de un mareo inoportuno. Sus amigos intentaron calmarlo con suaves palabras; le comentaron que no se preocupara, que siempre salían nuevas convocatorias para el puesto de juez. Él les confesó que ya no disponía de más dinero y ellos, enseguida, reunieron diez monedas para él.
Esa noche un hombre extraño se le apareció en sueños cantando una misteriosa canción:

Siempre hay alguien por encima de ti
que cura las tristezas y calma las angustias.
Habla con el laúd y juega con las palabras.
Un sauce costero es su morada,
no temas,
no te entristezcas
cuando se lance a las olas.


Al día siguiente, Li Tse-Kiang, paseando cabizbajo y pensativo por la orilla de un río, topó con un monje taoísta que estaba sentado bajo un sauce. Tras hacerle una reverencia, le pidió que le diera una medicina para su enfermedad.
- Te has equivocado de persona –contestó el sacerdote sonriendo-; yo no puedo curar enfermedades, sólo entrego melodías a quien recruza en mi camino.
Li Tse-Kiang se marchó no sin mostrar su decepción. Unos metros más allá se le iluminaron los ojos: ¡se trataba del hombre que se le había aparecido en sueño! Regresó al instante junto al monje y, arrodillándose, le ofreció a cambio de una melodía el dinero que sus amigos habían recogido para él. El sacerdote lo agarró e inmediatamente lo lanzó al río, ante lo que Li Tse-Kiang mostró su enfado.
- ¡Ajá! –replicó el sacerdote-. Eres un hombre necio. Esas piezas de metal ejercen sobre ti una poderosa influencia, y no dispones de suficiente fuerza para liberarte. No temas nada, encontrarás tu dinero en la orilla.
Li Tse-Kiang se giró hacia el lugar que señalaba el monje, momento que aprovechó éste para darle una fuerte palmada en la espalda mientras se lamentaba:
- Pobre hombre, si no tuvieras tu espíritu anclado en lo mundano…
Gracias al golpe, Li Tse-Kiang escupió el trozo de comida que todavía estaba aprisionado en su pecho. Se sintió profundamente aliviado y, al incorporarse para agradecerle al sacerdote el favor, éste ya había desaparecido.
Li Tse-Kiang encontró la bolsa con las monedas en el lugar que la había indicado el misterioso monje.

miércoles, 3 de agosto de 2011

HUA HU CHING

1     HUA HU CHING
Yo enseño, el Camino Integral de unidad con el gran y misterioso Tao. 
Mis enseñanzas son simples; si intentas hacer de ellas una religión o una ciencia, éstas te eludirán. 
Profundas, aunque simples, contienen toda la verdad del universo. 
Quienes desean conocer toda la verdad, disfrutan realizando los trabajos y servicios que les llegan. 
Cuando los han acabado, disfrutan limpiándose y alimentándose. 
Cuando se han cuidado a sí mismos, vuelven al maestro para instruirse. 
El camino simple conduce a la paz, a la virtud y a la abundancia. 
2  
Los hombres y las mujeres que desean ser conscientes de toda la verdad deben adoptar las prácticas del Camino Integral. 
Estas disciplinas consagradas calman la mente y conducen a la armonía con todas las cosas. 
La primera práctica es la de la virtud indiscriminada: cuida a aquellos que lo merecen; también, y de igual modo, cuida a los que no lo merecen. 
Cuando extiendes tu virtud en todas direcciones sin discernimiento, tus pies se hallan firmemente plantados en el camino que regresa al Tao. 
3  
Quienes desean encarnar el Tao han de aceptarlo todo. 
Aceptarlo todo significa en primer lugar no tener cólera ni resistencia hacia ninguna idea o cosa, viva o muerta, con forma o sin forma. 
La aceptación es la verdadera esencia del Tao.
Aceptarlo todo también significa apartarse de cualquier concepto de separación: hombre y mujer, yo y otro, vida y muerte.
La división es contraria a la naturaleza del Tao.
Renunciando al antagonismo y a la separación se entra en la unidad armoniosa de todas las cosas. 
4  
Cualquier salida del Tao contamina el espíritu.
La cólera es una salida, la resistencia es una salida, el ensimismamiento en uno mismo es una salida. 
A lo largo de muchas vidas el fardo de las contaminaciones puede hacerse grande. 
Sólo hay una manera de purificarse de estas contaminaciones, y consiste en practicar la virtud.
¿Qué se quiere decir con esto? 
Practicar la virtud es ofrecer desinteresadamente ayuda a los demás, dar sin limitación alguna el propio tiempo, capacidades y posesiones, en cualquier ocasión y lugar en que se necesiten, sin prejuicio alguno relativo a la necesidad de la persona que los necesita. 
Si tu disponibilidad a dar felicidad es limitada, también lo será tu disponibilidad a recibirla. 
Este es el sutil proceder del Tao. 
5  
¿Piensas que el universo está agitado? 
Ve al desierto por la noche y contempla las estrellas. 
Esta práctica deberá dar respuesta a la pregunta.
La persona superior dispone su mente como el universo dispone las estrellas en el cielo.
Conectando su mente con el origen sutil, la calma. 
Una vez calmada, ésta se expande de manera natural y, al final, su mente se vuelve tan vasta inconmensurable como el cielo nocturno. 
6  
El Tao hace surgir todas las formas, pero él mismo no tiene forma. 
Si intentas representar su imagen en tu mente, lo perderás. 
Es como clavar una mariposa con un alfiler: se capta la forma, pero se pierde el vuelo. 
¿Por qué no contentarse simplemente con vivirlo? 
7  
La enseñanza del Camino Integral continuará mientras exista un Tao y alguien que desee encarnarlo. 
Lo que está dibujado hoy día en estos pergaminos aparecerá de formas diferentes dentro de muchas generaciones. 
Sin embargo, estas cosas nunca cambiarán: Quienes deseen alcanzar la unidad, deben practicar la virtud sin hacer distinciones. 
Deben disolver todas las ideas de dualidad: bueno y malo, hermoso y feo, alto y bajo. 
Serán obligados a abandonar cualquier desviación mental nacida de creencias culturales o religiosas. 
De hecho, deberán mantener sus mentes libres de cualquier pensamiento que interfiera con su comprensión del universo como una unidad armoniosa. 
El comienzo de estas prácticas es el comienzo de la liberación. 
8
Confieso que no hay nada que enseñar: ni religión, ni ciencia ni cuerpo de informaciones que regresar tu mente al Tao. 
Hoy hablo de esta manera, mañana de otra, pero el Camino Integral permanece siempre más allá de las palabras y más allá de la mente. 
Sé simplemente consciente de la unidad de las cosas. 
9  
Quien desee la admiración del mundo hará bien en amasar una gran fortuna y en gastarla después. 
El mundo responderá con admiración conforme al tamaño de su tesoro. 
Por supuesto, esto no tiene ningún sentido.
Deja de luchar por la admiración. 
Coloca tu interés en el Tao.
Vive de acuerdo con él, comparte con los demás las enseñanzas que llevan a él, y serás bañado por las bendiciones que fluyen de él. 
10  
El ego es un mono que salta a través de la selva: totalmente fascinado por el reino de los sentidos, cambia de un deseo a otro, de un conflicto a otro, de una idea centrada en sí misma a la siguiente. 
Si lo amenazas, realmente teme por su vida.
Deja partir a ese mono. 
Deja partir los sentidos.
Deja partir los deseos.
Deja partir los conflictos.
Deja partir las ideas. 
Deja partir la ficción de la vida y de la muerte.
Permanece simplemente en el centro, observando. 
Y después olvídate de que estás en él.

El Metal: El Pulmón

En el Pulmón, el Qi del Cielo (aire) se une con el Qi de la Tierra (nutrición) formando el Qi que vitaliza la vida humana. Como un ministro que dirige los asuntos de estado y determina los márgenes territoriales, el Pulmón gobierna la relación entre el interior y el exterior, marcando los límites y protegiendo las fronteras. Mediante el control y la delicadeza, la expansión y la contracción, el Pulmón recoge, mezcla y esparce el Qi, infundiendo el ritmo y el orden.
Como intermediario entre nuestro mundo interno y externo, el Pulmón se encarga de la seguridad externa. Ia piel, a veces denominada el «tercer Pulmón», es la superficie más externa de una persona y proporciona la envoltura elástica que nos contiene y nos protege de las intrusiones. El Pulmón transpira a través de la capa dérmica: mediante el sudor, además de las aberturas de los poros, ajusta constantemente la humedad y la temperatura del cuerpo. Como una membrana de porosidad variable, el Pulmón tensa y engrosa la piel para evitar las influencias no deseadas y guardar los recursos internos valiosos, o la afloja y la vuelve fina para liberar las sustancias o sentimientos internos no queridos y permitir que penetren las influencias deseables. A menudo, la primera estrategia para tratar una enfermedad aguda es expulsar las influencias patógenas de Frío, Calor y Viento a través de la piel utilizando métodos que estimulan la circulación periférica y abren los poros. El Pulmón moviliza la periferia, llamada wei Qi, o primera línea defensiva, que permite (pie el cuerpo se adapte a su ambiente y resista la adversidad. Si el Qi del Pulmón es débil, nuestra protección física y emocional se reduce, haciéndonos vulnerables a las enfermedades infecciosas así como a los sentimientos y pensamientos negativos de otras personas.

La suave dispersión de los Fluidos por todas las partes del cuerpo es también tarea del Pulmón. Este recoge la Esencia de los Líquidos y la transporta hacia arriba desde el Bazo, y la humedad del aire, «precipitándola» hacia abajo, como la niebla, hacia el Riñón y la Vejiga, también liberándola en forma de sudor. De este modo el Pulmón sirve para regular la emisión de orina. Si se impide que el Qi del Pulmón descienda adecuadamente, los Fluidos se acumulan en la parte superior del cuerpo, provocando edema facial arriba, y micción escasa abajo. Si. Por el contrario, el Qi del Pulmón se debilita gravemente, los Fluidos y la vitalidad pueden escapar del cuerpo a través de una transpiración excesiva (sudor en reposo) o de una micción descontrolada (incontinencia), porque el Yang del Pulmón no puede evaporar el Qi hacia arriba. Como los Fluidos se generan en el Bazo y son transportados hacia el Pulmón, si existe un problema en el Bazo, se producirá una acumulación de Fluidos o Humedad. Esta Humedad del Pulmón puede congelarse en flema, que obstruye los bronquios, la garganta y la nariz, dificultando la respiración, provocando tos, asma y congestión nasal. El Qi es el foco superior que acepta el Qi, y el Riñón es el foco inferior que lo atrapa y lo fija. La falta de aliento puede producirse cuando el Riñón no puede almacenar el Qi que recibe el Pulmón.
La conexión pulmón-corazón
Como el Pulmón dirige el Qi y el Corazón rige la Sangre, dependen uno del otro. El axioma «Donde va el Qi, hacia allá fluye la Sangre» significa que el movimiento del Qi gobierna el flujo de Sangre. El latido del Corazón mantiene el ritmo de la respiración, y la Sangre sigue al Qi en su vuelta al Corazón. Una congestión del Qi del Pulmón impide la circulación de la Sangre, causando palpitaciones y plenitud en el pecho. Una deficiencia del funcionamiento del Corazón perjudica la respiración, provocando falta de aliento y sudor abundante. Otras alteraciones del Pulmón se manifiestan como desórdenes de la piel, de las membranas mucosas y de la circulación venosa. Los signos de esto incluyen piel seca y arrugada, dermatitis alérgica, pérdida del vello corporal, venas varicosas, sensibilidad a las corrientes de aire y a los cambios de temperatura, y baja inmunidad frente a resfriados, gripes y otras infecciones microbianas.
La pareja del pulmón: El intestino grueso
El Intestino Grueso es la pareja Yang del Sistema del Pulmón. Acumula y elimina los desechos de la digestión y el metabolismo, continuando el proceso de refinamiento que se inicia en el Pulmón. Al expulsar el aire viciado y excretar las materias turbias, el Pulmón y el Intestino Grueso excluyen lo que ya no se desea o se necesita.
En general, el Intestino Grueso define y configura lo que ya no queremos y lo que no somos nosotros, creando espacio para reconocer lo que sí queremos y lo que somos. Esto nos ayuda a distinguir concretamente entre lo que es útil e inútil, beneficioso o dañino, correcto e incorrecto, propio y ajeno.
Cuando el Intestino Grueso no funciona correctamente, las distinciones se vuelven vagas y ambiguas, y la mente está ofuscada y confundida. Si no se elimina correctamente lo viejo, no queda lugar para lo fresco y lo nuevo, dejando una sensación desagradable de mala ventilación, aire viciado y ausencia de vitalidad. Inversamente, no ser capaz de extraer y retener lo bueno deja a la persona débil, vacía y seca. El Intestino Grueso, junto con el Pulmón, favorece el proceso de separación, destilación, individualización y eliminación, engendrando un sentimiento distinto de la forma y la valía.
La facilidad mediante la cual somos capaces de dejar ir los pensamientos, sentimientos y apegos innecesarios la proporciona la función de este Sistema. Dejar ir puede experimentarse en el grado extremo como una pérdida de control, provocando un urgente deseo de ejercer una autorregulación más estricta. Para preservar la seguridad puede sacrificarse la relajación y la flexibilidad. Esta resistencia a liberar fácilmente los impulsos y expresar los sentimientos se manifiesta como una postura de rigidez y retención. Suprimir las reacciones físicas y emocionales es una forma de acorazarse, tensando y endureciendo el envoltorio protector de la psique y del soma. La piel y la musculatura superficial se vuelven rígidas, los músculos más profundos del diafragma y los Intestinos se vuelven espasmódicos y tensos. Las consecuencias de este exceso de represión por parte del Pulmón y del Intestino Grueso son asma, estreñimiento, rigidez de la columna y el cuello y colon espástico. La  fijación mental y la inhibición emocional limitan el grado de respuesta, refrenando la creatividad y la adaptabilidad del organismo.
Inspiración, forma
Con la inspiración y la expiración el cuerpo se infla y se encoge, definiendo los márgenes de la contracción y la expansión, las polaridades fundamentales del Yin y del Yang. la respiración se divide en inhalación y exhalación; entre las dos hay un breve intervalo, un momento de quietud que separa los dos fenómenos, marcando el comienzo y el final. El Pulmón es sensible, tierno, dúctil, abierto y refinado, pues dirige el Qi proporcionando forma, estructura y definición. Cuando el Pulmón es enérgico y fuerte, la piel es suave, flexible y fresca, el cuerpo tiene abundante energía física, un ritmo equilibrado y una inmunidad superior. El Pulmón es la fuente de la inspiración; crea el espacio abierto, el vacíe dentro del cual toman forma las nuevas ideas y emociones.


martes, 2 de agosto de 2011

Kigong Shen Uh Kwan

Primer Curso de Iniciacion al Kigong. Nivel 1.
Astillero 16 de julio del 2011.
Manuel Goméz Hevia
Aqui podeis recordaros de las tecnicas basicas de enraizamientos y separación de Nubes

El agua: el Riñón

El Riñon consolida y almacena el Qi que inicia y mantiene el crecimiento de la vida. Como un ministro del interior que conserva los recursos naturales, guardando las reservas de las materias primas esenciales para usarlas en las épocas de crecimiento, de crisis o de transición, el Riñon conserva lo que es esencial, la Esencia, la vida humana. Como un pozo de vitalidad y resistencia, el Riñon es el germen del intelecto, de la creatividad y el hogar de nuestros instintos de procrear y sobrevivir.
Alberga el germen
Antes de nacer, nuestros padres nos dotaron con el Qi Esencia], que después del nacimiento se fortalece con el Qi del Aire procedente de los Pulmones y el Qi de los Alimentos procedente el Bazo. Tanto el Qi heredado como el adquirido son acumulados dentro de la reserva del Riñón para ser utilizados cuando se necesiten. Decir que el Riñón guarda la Esencia significa que genera y almacena la sustancia material original que forma la base de todos los tejidos; encierra el núcleo del que emana toda la vida. La Esencia del Riñon puede compararse con la información genética codificada en el ADN, la plantilla del destino biológico, que junto con las proteínas estructurales básicas forma las hormonas y los enzimas que dirigen el metabolismo celular. El Riñon es la base que apoya nuestra regeneración continua, el eslabón en nuestra cadena de la existencia. Al ser el responsable de la procreación, el Riñon transmite nuestra herencia física y cultural como especie desde millones de años de evolución. Es la fuente de nuestra imaginación, que nos permite mirar hacia atrás para ver nuestros orígenes ancestrales, nuestra ascendencia, y mirar hacia delante para prever nuestro futuro y crear nuestra descendencia.
Del mismo modo que las profundas raíces de un árbol succionan los jugos de la tierra mientras sus frondosas ramas absorben la luz del sol y el aire, también el Riñon garantiza el aporte de la savia Esencial (Yin) al tiempo que proporciona el calor Esencial (Yang). El Riñon Yin, como el sistema de las raíces, nutre y humedece, mientras que el Riñon Yang calienta y activa. Aunque el Rifan es el órgano más Yin que existe, contiene en su interior la semilla Yang de su opuesto, el Fuego. Los mecanismos vegetativos rudimentarios que mantienen al organismo -similares a la función integrada del hipotálamo, pituitaria y glándulas suprarrenales en términos occidentales- están gobernados por el Riñon. La principal sustancia catalizadora, la Esencia del Riñon (Jing). Permite al Espíritu (Shen) que se exprese. Jing y Shen interactúan para crear el soma y la psique, el Agua y el Fuego, el Yin y el Yang. La Esencia (Shen) que anima el ser es necesaria para humanizar a su receptáculo, el cuerpo. El receptáculo (Jing) es preciso para dar a la existencia consciente su forma.
El Riñon da soporte a los órganos reproductores (ovarios, útero, testículos, próstata), a las sustancias reproductoras (esperma y óvulos) y a la actividad reproductora (impulso sexual, ovulación, eyaculación, fertilización, gestación). Cuando el Qi del Riñon es abundante, la vida sexual y reproductora es vigorosa y duradera. El aporte de la Esencia heredada es finito; nuestra vida está delimitada por agotamiento final.
El Riñon genera los elementos estructurales del cuerpo y regula el crecimiento. La evolución adecuada de la maduración física y mental depende de un suministro apropiado de la Esencia, que origina la médula ósea, la cual a su vez produce el cerebro y la médula espinal, los huesos, dientes. Sangre y cabello. Al cerebro se le llama «mar de la médula», lo cual significa que la inteligencia y la agudeza mental y de los sentidos son aportadas por el Riñon, como lo es la aparición en su momento de los dientes y las características sexuales secundarias, la capacidad de almacenar calcio en los huesos, de almacenar las experiencias en la memoria y de acelerar la producción de glóbulos rojos.
Cuando la Esencia es abundante, la fuerza vital y la capacidad para resistir enfermedades y adaptarse a los cambios es fuerte. I a salud débil, las malformaciones en el desarrollo, el retraso mental, la fragilidad de los huesos y el envejecimiento prematuro significan una insuficiencia de la Esencia. El marchitamiento de la piel, el deterioro de las articulaciones, la pérdida de las facultades mentales, la rigidez de la columna, la caída o encanecimiento del cabello, la disminución de la visión y el oído, pérdida de dientes, impotencia y esterilidad delatan su declinar. Una amplia resistencia, el cabello exuberante, la energía constante, los dientes sanos y la agilidad de pensamiento evidencian una Esencia floreciente.
Metabolismo de los líquidos
El Yin del Riñon es la base de todas las sustancias líquidas del cuerpo, y el Yang del Riñon regula el equilibrio y la circulación de estos constituyentes. Todas las secreciones internas y los líquidos intersticiales derivan de la síntesis de la Esencia Yin heredada y adquirida, incluyendo lágrimas, saliva, moco, orina, sudor, líquido cefalorraquídeo, líquido sinovia!, plasma y semen. El carácter Yin del Riñon acepta y almacena el Qi que precipita hacia abajo desde el Pulmón y el Qi excedente del Bazo y del Estómago, transportado por el Intestino Delgado. Succionando y reteniendo el Qi descendente del Pulmón, el Riñon fija el Qi como una raíz, permitiendo la profunda inhalación y perfusión del oxigeno (Qi del Aire). El Riñon en la parte inferior del cuerpo y el Pulmón en la superior actúan sobre el Qi del mismo modo que la espiral móvil dentro de la cámara magnética que genera un campo eléctrico oscilante. El Qi se mue-ve constantemente hacia abajo y hacia arriba entre los polos de la pelvis y el pecho.
Si se condensa demasiado líquido en la parte inferior, se estanca, produciendo hinchazón del abdomen inferior, inflamación de las rodillas y tobillos y bolsas debajo de los ojos. La retención de agua representa la incapacidad del Riñon para eliminar los líquidos turbios o la acumulación excesiva de energía excedente en forma de Humedad. En cualquier caso, la acumulación de líquido intersticial puede interferir con la circulación del Qi y de la Sangre, afectando principalmente a los Pulmones y al Corazón. Un exceso de Fluidos en el Pulmón se convierte en flema, que se manifiesta como hinchazón de la cara y la piel entre las cejas y los párpados superiores. En el Sistema del Corazón, un exceso de Fluidos se presenta como edema dentro del pecho y en el abdomen superior e hinchazón de las manos y la lengua.
La pareja del riñón: La vejiga
Al igual que el Riñon filtra lo puro de los líquidos turbios para producir orina, evaporando los Fluidos hacia arriba y reciclando los líquidos nutrientes y lubrificantes, la Vejiga retiene y libera el líquido innecesario. A través de su pareja Yang, la Vejiga, el Riñon controla el esfínter superior, regulando la descarga de orina y de semen. A través de los otros esfínteres inferiores del ano y del cuello del útero el Riñon regula la retención y liberación de las deposiciones y la Sangre menstrual.
Al igual que una brasa que esconde su condensado calor bajo la oscura corteza de un tronco carbonizado puede prender un nuevo leño, así también el Yang de Riñon enciende el proceso metabólico. Mientras el radiante Yang del Corazón destella en la superficie a través de los ojos, el Yang del Riñon queda enterrado bajo el ombligo, donde puede sentirse el calor pero no verse, como el núcleo fundido de nuestro planeta. El Yang de Riñon aporta la chispa necesaria que estimula el organismo, calienta el cuerpo, anima el Espíritu, activa el Bazo y el Hígado, ayuda al Pulmón a movilizar el Qi, impulsa la reproducción, regula el metabolismo del agua y supervisa a la Vejiga en el almacenamiento y eliminación de la orina. Si el Yang del Riñon es excepcionalmente vigoroso, se tiene una resistencia superior al frío, una apreciable capacidad digestiva y potencia sexual de por vida.
Cuando la circulación de los líquidos no está bien regulada, a menudo es un problema del Yang de Riñon que no controla el Yin del Riñon. El calor Esencia] no debe cesar: si lo hace, el cuerpo no puede mantener el calor, la respiración es fluctuante y los alimentos no pueden digerirse. Con la deficiencia del Yang fe Riñon una persona siente frío y se nota fría al tocarla, y manifiesta síntomas como diarrea, micción frecuente o incontinencia, infertilidad, impotencia, eyaculación precoz, pérdida de audición, zumbidos en los oídos, mareos por fatiga y debilidad y dolor en las rodillas, parte baja de las piernas y de la espalda.
El Riñon Yang es susceptible de sufrir daño si se expone al frío físico -el clima frío o el aire acondicionado- o por la ingestión de alimentos o bebidas helados o refrigerados. El Yin del Riñon es dañado por los agentes químicos, como antibióticos, analgésicos, tranquilizantes, aditivos de los alimentos, contaminantes ambientales y drogas recreativas. También puede perjudicarse por la ingestión inapropiada de agua o por la ingestión de alimentos demasiado amargos, salados, calientes o picantes. En general el Riñon se perjudica por la falta de sueño y por un exceso de ejercicio, de actividad sexual o de trabajo.
La fuente original
Todos los Órganos dependen del Riñon para ser humedecidos y regenerados (Yin) y para ser estimulados y calentados (Yang). El Riñon capacita al Bazo para lubrificar y nutrir los tejidos y suministra el Calor esencial para la digestión: el Corazón se apoya en el Yang del Riñon para ejercer la fuerza necesaria para la sístole; el Pulmón requiere el poder de vaporizar, humedecer y retener del Riñon. El Hígado necesita la capacidad humectante del Yin del Rifan para nutrir la Sangre y aplacar el Fuego del Hígado, y requiere la función movilizadora del Yang del Riñon para regular y distribuir la Sangre. Una deficiencia en cualquier otro Sistema de Órganos afecta al Riñon drenando sus reservas de Esencia.
Juntos el Yin y el Yang del Riñon construyen la sustancia y estimulan la función del soma y de la psique. El Riñon es como un mar interior: en la superficie es apacible y sereno, alimentado por las lluvias estacionales y los ríos subterráneos de aguas puras y cristalinas, con cálidas emanaciones ricas en minerales que burbujean en su suelo, renovando las saladas aguas que acogen la fértil vida marina. Sumergido en nuestro interior, el Riñon envuelve la oculta y preciosa casa de la energía que potencia la vida.